lunes, 9 de enero de 2017

Matrimonio Anolfini


En este cuadro aparecen diferentes símbolos: los zuecos de madera indican que los esposos están descalzos, como Moisés cuando tocó tierra sagrada en el Sinaí, lo cual simboliza lo sagrado del acto.

El perrito simboliza la fidelidad conyugal; la borla que cuelga de la cabecera de la cama y el vientre abultado de la mujer aluden a la fertilidad; las frutas sobre la ventana y el arca a la inocencia original.
La única vela que está encendida en pleno día en la lámpara simboliza a Jesucristo, cuya presencia santifica los esponsales.
La cama con dosel es signo inequívoco de que se hallan en la cámara nupcial.
 
En el espejo se reflejan diez escenas que representan la Pasión y la muerte de Jesucristo. La implicación en los detalles de Van Eyck le llevó a crear una obra llena de simbolismo. 

El vestido de moda de la época representaba provocaba una deformación en el cuerpo de la mujer. Por esta razón, se piensa que está embarazada, pero no es el caso. 

Una inscripción del fondo representa en letras góticas la declaración "Jan Van Eych estuvo aquí". Declaración lógica del pintor cuando tenía una estrecha relación con la familia Arnolfini. 

Volviendo al espejo, se trata de un brujas y se usaba en la época para espantar la mala suerte de los hogares. 

El espejo también muestra a dos asistentes a la boda. Un de ellos con características de pintor y que posiblemente se trate de Van Eyck. 

La escultura de Santa Margarita que aparece en el pomo de la cama también simboliza la unión matrimonial y la fertilidad. 

Los zuecos que hay en el suelo simbolizan el vínculo con el hogar y el posicionamiento de los mismos muestran que la riqueza económica procedente del exterior procede del marido. 

Hay muchos símbolos que representan la riqueza como la alfombra junto a la cama. 

Los cristales son signos de pureza y el rosario que aparece representa la obligación de ser devotos. 

La gárgola que aparece sobre las manos del matrimonio representa una especie de exorcismo que pretende alejar el mal de la pareja ya que Arnolfini era un auténtico mujeriego. 

Por esta razón, pisan el suelo descalzos. Para asegurar un futura fertilidad. 

El rojo representa la pasión y el verde vuelve a hacer referencia a la obsesión por el linaje. Además, la cama también representa la descendencia y la clase de la que proceden.

Las naranjas en la ventana: son frutas que deben ser importadas desde la Europa del sur. Indican el poderío económico de Arnolfini y a la vez el origen del mismo.

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